Joel García: Hay presos que dicen que prefieren estar con pranes que en la Dgcim
El abogado Joel García confirmó que presos de la Dgcim y el Sebin están siendo trasladados a cárceles comunes. Explicó que pese a que esté «es el deber ser» según la ley, el problema es que en los centros de reclusión no hay condiciones de salubridad ni alimentación para los privados. Al tiempo que aseveró que hay presos que tras ser torturados por custodios y funcionarios, prefieren estar con «pranes» que en la Dgcim.
Este martes, la opositora Delsa Solórzano alertó del traslado de «presos políticos» a cárceles comunes, luego de que el Gobierno ordenara al Servicio de Inteligencia y la Dirección de Contrainteligencia Militar transferir la custodia de detenidos en sus sedes al Ministerio Penitenciario. «Gaceta Oficial 42.125, contiene decreto 4.610 de Nicolás Maduro, donde ordenó a Dgcim (Dirección de Contrainteligencia Militar) y a Sebin (Servicio Bolivariano de Inteligencia) transferir la custodia de privados de libertad al Ministerio de Servicios Penitenciarios. Ello implica trasladar a los presos políticos a cárceles comunes», posteó Solórzano en Twitter.
La mañana de este jueves, García quien ha representado a decenas de presos políticos dijo al periodista Román Lozinski que han podido confirmar los traslados. Destacó que han sido trasladados presos del Sebin, de la Dgcim y que también serán trasladados presos que se encuentran en calabozos del Cicpc.
García precisó que cualquier privado de libertad en Venezuela corre peligro porque en las cárceles no se cumple lo que establece la constitución, «no existe un sistema carcelario humanista, lo que establece el artículo 272 de la carta magna y mucho menos se cumple lo que establece el código penitenciario».
«Los derechos a trabajar, a la recreación, a la alimentación, al estudio no existen. Es relativo si corren más peligro en la Dgcim, el Sebin o en una cárcel común porque dentro de la Dgcim o Sebin la tortura está presente, están aislados, sin ventilación. El peligro que corren es respecto a los funcionarios; pero, en las cárceles comunes el peligro es otro recluso, ¡Pero, cuidadito si estos presos no son más solidarios que los funcionarios!».
«No hay ventaja alguna de estar en un lado u otro. Hay presos que dicen que prefieren estar con pranes que en la Dgcim; pero el riesgo en los centros de reclusión donde están siendo trasladados son los presos comunes y la alimentación precaria», sentenció.
Visita conyugal cuesta hasta 30 dólares
García describió las condiciones en las que conviven presos de El Rodeo, Guatire, estado Miranda. «Hay hacinamiento total, no tienen agua y cuando llegan cisternas solo le dan un tobo a cada preso, la comida es una arepa con 3 cucharadas de granos para las tres veces al día».
«Los presos que no tienen familiares cercanos, caen en desnutrición, la visita tiene que ir con jeans, camisa blanca y sandalias abiertas. Si el preso desea una visita conyugal tiene que pagar 30 dólares. No los están sacando al patio, solo reciben visita una vez a la semana y se paga por todo», afirmó.
Pese a las críticas, el experto en leyes y defensor de DDHH, enfatizó que lo correcto es que una persona una vez que es aprehendida por los cuerpos de seguridad esté a la orden del servicio penitenciario; pero esto no ocurre porque los presos políticos quedan a la orden del Sebin, Dgcim o Faes. «Los presentan en el tribunal luego de las 48 horas, cuando ven que están enteritos, los devuelven a los calabozos, pasan los 45 días de la acusación, y 20 días después la audiencia preliminar», detalló.
«¿Pero, qué sucede en el interin de este proceso? el preso está incomunicado y es donde son torturados».