¡Gracias!

¡Gracias! ¡Muchas Gracias! Agradezco infinitamente a los anzoatiguenses que se dieron cita en la cancha de la escuela María Guzmán de Marcano en Sierra Maestra de Puerto La Cruz y a la dirigencia nacional de nuestro partido Acción Democrática, que nos dieron respaldo en esta lucha titánica que llevamos adelante en defensa de Anzoátegui.

¡Cuánto calor humano! ¡Cuánto sentimiento! ¡Cuánto cariño! Hoy me siento renovado, con energías plenas, con entusiasmo y con más fe que nunca para seguir dando lo mejor de mí para continuar en movimiento en procura de seguir cumpliéndole a todos los anzoatiguenses.

En esa cancha – en el corazón de un grandioso sector popular portocruzano – le reiteré a decenas de ciudadanos ese compromiso que ha movido mi vida, y la seguirá moviendo por siempre, como es el de servir con pasión, con dedicación y con vocación a nuestro amado estado.

Allí, frente a los compañeros Carlos Prosperi, Luis Aquiles Moreno, Piero Maroum, Jesús Yanez, allí frente a la dirigencia y militancia acciondemocratista de Puerto La Cruz y de la zona norte de Anzoátegui reafirmamos nuestro sentir democrático y nuestro deber – como adeco, como venezolano, como demócrata – de darlo todo para que Anzoátegui se mantenga libre de las manos peludas y sectarias que por más de 20 años han destruido al país.

Agradezco a nuestra valiente dirigencia adeca, y más que su apoyo, agradezco su trabajo, su sacrificio, su lucha diaria, agradezco ese espíritu de combate que los convierte en el mejor equipo de todos; agradezco enormemente ese ímpetu bravío que no solo sostiene al partido sino que influye en vigor y fuerza a toda la sociedad venezolana.

A los compañeros del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), les reitero nuestro compromiso, nuestra lealtad y sobre todo nuestro trabajo. A nosotros nadie nos dividirá, nadie nos sacará del foco y menos nos derrotará, aquí hay una estructura de trabajo que incansablemente está en movimiento haciendo que cosas buenas ocurran y que el estado avance a pesar de los ataques y agresiones que hemos sufrido.

El Gobierno de Anzoátegui – el cual encabezo – ha logrado soportar las presiones y las campañas en contra, ha superado zancadillas y obstáculos de toda índole, gracias a dos fuerzas complementarias. Una es la de un equipo de gobierno que ha librado la más ardua batalla por mantener en pie una institución corroída por años de incapacidad y desidia, y la segunda es la de un equipo político que batalla día a con día en las calles de Anzoátegui.

Igualmente, no puedo dejar por fuera, a mis adecos de la zona oeste y en especial a mi querida alcaldesa “la negra” Francisca Rojas, quienes realizaron un grandioso acto en la cancha Otto Padrón de Clarines, que reforzó en todos nosotros el ánimo y las fuerzas. ¡Gracias compañeros!

Y, agradezco a Dios y a la Virgen de la Candelaria por tanto respaldo, por tanta ayuda y por colocarme en esta responsabilidad y justamente en este momento.

Si Dios me puso en la Gobernación de Anzoátegui en esta hora que vive el país, lo hizo porque debo cumplir con un objetivo y creo – estoy convencido de eso – que ese objetivo es defender a este pueblo anzoatiguense hasta el último momento, y así lo haré.

¡Gracias a todos! ¡Seguimos en movimiento!