Mutatis mutandis en Venezuela

Opinión | julio 5, 2020 | 6:18 am.

Nuestro país atraviesa por la peor crisis que haya vivido en toda su historia. La situación se ha complicado tanto que ni el pueblo ni el régimen tienen la menor capacidad para resolver sus problemas. Basta salir a la calle y observar el estado de deterioro en que se encuentra, destrozado por los cuatro costados, con una pobreza extrema, servicios públicos en el suelo, escasez de todo tipo, sueldos de hambre, hiperinflación, alto costo de la vida, abusos, inseguridad y pare usted de contar.

De allí, que Venezuela necesita un cambio con urgencia. “Mutatis mutandis” o cambiar lo que se tenga que cambiar.

Jamás podemos lograr un cambio con elecciones amañadas y con los mismos actores, el régimen y sus cooperantes. El régimen se ha valido de todo para permanecer en el poder. El nombramiento de un nuevo CNE y la oferta engañosa de elecciones no es más, que un nuevo pote de humo. Tenemos que tener claro que éste no es un régimen común y corriente. Tiene aristas perversas que todos conocemos.

El mundo tiene sus ojos puestos en el régimen y sabe a ciencia cierta de qué se trata.

El caso de Álex Saab no es un tema aislado. Su captura pone en peligro la organización criminal a la cual pertenecen muchos del régimen. Para nadie es un secreto que su detención es una filosa daga tanto para él como para sus socios de cartel. De allí su desesperación y desmoralización. Por los vientos que soplan se destapará la olla más podrida y nauseabunda que hemos tenido a lo que se refiere a lavado de activos, enriquecimiento ilícito, corrupción y otros delitos. Dará a conocer todo el entramado criminal, con sus guisos y aderezos incluidos.

Con la extradición de Saab rodarán cabezas, y como dice el popular Curichagua: “agárralo que va en bajá”. La lista es larga y tendida, así lo señala el criminalista Iván Simonovis.

Lo cierto que el daño que le han hecho a la República, es irreversible, los irresponsables se dieron a la tarea de arruinar y demoler a uno de los países más rico de América, como es el caso de Venezuela, pero nunca es tarde cuando la dicha llega, y no hay mal que dure cien años.

La extradición, dicen, va viento en popa. Como cosa curiosa, al magnánimo agente diplomático del régimen, lo tienen encarcelado con narcotraficantes, no fue favorecido como el cupido «Pollo» Carvajal en Aruba. El diplomático de papel no goza de los mismos privilegios y lo tienen como un simple narco en la isla de Sal de Cabo Verde.

El segundo recurso de “habeas corpus” interpuesto por la defensa, tampoco prosperó. Supuestamente argumentaron que se trata de un caso político, pero la “alerta roja”, como el más alto nivel de amenaza o alerta, habla de otra cosa.

Dos cosas llaman la atención del caso Saab. La dualidad de funciones; ya que se identifica como diplomático y al mismo tiempo cumple gestiones comerciales. Igualmente llama la atención el ocultar su nombre en la lista de pasajeros. Con esta triste historia se demuestra que “el crimen no paga”. Amanecerá y veremos.

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