Maduro: El 4F fue la primera rebelión en el mundo contra el FMI
El mandatario Nicolás Maduro volvió a denunciar este martes que existe un grupo de mercenarios, según él, financiados y entrenados en Colombia, para atacar unidades y naves militares venezolanas.
«Yo lo he denunciado, hay un grupo de mercenarios, financiados y entrenados por Iván Duque en Colombia, que han sido enviados a Venezuela a hacer ataques terroristas contra unidades y naves militares de Venezuela», dijo el gobernante socialista en el Cuartel de la Montaña, donde conmemora los 28 años de la intentona golpista del 4 de febrero de 1992.
Por lo tanto, instó a todos a estar pendientes «porque estoy seguro que los vamos a capturar y a castigar de acuerdo a la justicia venezolana, porque queremos independencia, paz y dignidad».
Por su parte, volvió a reconocer que hay problemas que son responsabilidad de su gobierno, «y tenemos que resolverlos nosotros mismos con inteligencia, visión de futuro, capacidad de gobierno».
En ese marco, señaló que para este año viene pidiendo «grandes cambios dentro del gobierno y en los poderes públicos» y juró que hará su «mayor esfuerzo como presidente» para dar ejemplo de los cambios que necesita Venezuela «y ponerme al frente de las rectificaciones que necesita este país y que nadie lloriquee, vamos con todo. Y pido el apoyo de todo el equipo de los líderes, lideresas, pido la opinión publica del pueblo».
Ejercicios militares
En tanto, Maduro aprovechó para anunciar los primeros ejercicios militares del año «para poner en práctica y visualizar la defensa de las ciudades así que se tiene que mover la FANB profesional con su capacidad de armas y la milicia como componente integrado para defender todas las ciudades del país, entrenarnos, capacitarnos, y poner en práctica de una vez esta ley en todo su sistema organizativo».
Dijo que los ejercicios se realizarán los días 15 y 16 febrero, que calificó como «las primeras prácticas de esta ley constitucional” de la FANB, que incluye a la milicia como componente de la institución militar.
“Mientras la derecha sigue con su bobolongo (refiriéndose a Juan Guaidó) dando el ridículo y vendiendo la patria imaginaria que vende y robando; nosotros, los que amamos Venezuela, avancemos en ofensiva, no perdamos un solo día es tiempo de avanzar en lo político y militar”, señaló.
4F
Entretanto, Maduro se refirió al movimiento golpista del 4F y aseguró que ese día «fue otro grito que marcó la historia» tras «dos siglos de traiciones, de saqueo a nuestras riquezas, dos siglos de opresión a nuestro pueblo, traiciones a Bolívar, a Zamora, a Isaías Medina Angarita, la traición del 23 de enero y el Pacto de Punto Fijo, nuestro pueblo lo vivió lleno de dolor pero con esperanza, dos siglos esperando hasta que llegó el grito rebelde del 4F, Chavez y el MBR200».
A su juicio, la «canalla oligarca» miente sobre el intento de golpe de Estado y asesinato del presidente constitucional de aquel momento, Carlos Andrés Pérez, al insistir en que «ese fue un grito de independencia nacional, de soberanía, de rebeldía, de los humildes, de los explotados, de los humillados de siempre. Fue una rebelión, hoy lo podemos decir, la primera rebelión en el mundo contra el FMI, contra el neoliberalismo, contra el Imperialismo. Eso es lo que diferencia al 4F de la chamusca financiada por EEUU, aquí hubo dignidad, honor militar, aquí se plantó la bandera de Bolívar».
Aseguró que los días consiguientes al golpe de Estado, la gente salía a pintar banderas nacionales y rostros de El Libertador y eran perseguidos y apresados. «El 4F marcó la resurrección de Bolívar en su imagen, pensamiento, fuerza. Perseguían a quienes pintaran un mural con la cara de Bolívar y pusieran un pensamiento o pintaran la bandera nacional», acotó.
Lo que para el gobierno es el «día de la dignidad nacional», marca el «comienzo de una historia de una patria ahora sí independiente, ahora sí democrática», para seguidamente exaltar que «Hugo Chávez fue un gran refundador de la democracia, el gran democratizador de la vida política de nuestro país».
El 4 de febrero de 1992, un grupo de militares comandados por Chávez, decidieron sublevarse y tratar de derrocar el gobierno democráticamente electo de CAP, debido a las medidas económicas que ahorcaban al pueblo venezolano en aquel momento.
El golpe fue infructuoso. Las fuerzas leales al gobierno adeco abatieron y detuvieron a otros tantos. Fue entonces cuando Chávez decidió entregarse y asumir toda la responsabilidad del movimiento militar en el entonces conocido como Museo Histórico Militar, haciendo célebre la frase: «por ahora los objetivos no fueron logrados».
