Unas 2 horas se tardan en atender a pacientes que llegan a emergencia, según Encuesta Nacional de Hospitales
Médicos por la Salud presentó este miércoles los resultados de su último informe, y pese a que la ONG aseguró que hay una leve mejoría en cuanto al abastecimiento, todavía hay fallas operativas que persisten: se tardan un promedio de dos horas en atender a pacientes en emergencias, en otros países son 40 minutos.
Los datos fueron ofrecidos por el médico infectó logo Julio Castro, quien precisó que el desabastecimiento en quirófanos fue de 70% en 2022, por lo que los pacientes deben comprar casi todo para poder ser operados.
Lencería, material descartable, analgésicos y anestésicos fueron los principales insumos con fallas, ya sea de forma intermitente o total, en los quirófanos. Mientras que las medicinas para el asma, antihipertensivos, analgésicos, esteroides, insulina y fluidoterápicos fueron los insumos más escasos dentro de las emergencias.
Asimismo, indicó que 88% de los hospitales no tiene servicios de tomografía o resonancia magnética y que casi 60% de los hospitales no contó con agua corriente. 1,2 horas fue el promedio de horas que pasaron sin luz en la semana.
59 % de hospitales vivió hechos violentos en 2022, según Encuesta Nacional de Hospitales
El pasado 25 de enero, la ONG informó que 59 % de los centros sanitarios públicos de Venezuela reportó hechos de violencia hacia el personal de salud por parte de los familiares de los pacientes; y que 41 % de las instalaciones sanitarias sufrieron robos y hurtos, cuyas víctimas fueron los trabajadores de estos centros, los pacientes y los acompañantes de los enfermos.
Las agresiones se deben -suscribe el documento- a que «los familiares culpan al personal por las deficiencias de los centros de salud, falta de equipos y de insumos que son necesarios para poder atender a los pacientes».
«Nuestros hospitales están minados de inseguridad y violencia y esto, dentro de un contexto ya precario en términos de insumos y servicios, hace que quiénes hacen vida, tanto el personal como los pacientes, sean víctimas de un sistema complejo y con poca capacidad de atención».