Grupo Costel: Soporte eléctrico confiable de la industria venezolana
La industria pesada, esa que se ignora en lo cotidiano, pero que siempre está operativa, no pudiera mantenerse de no ser por el apoyo de empresas que sirven de base para ese movimiento asegurado. El Grupo Costel es una de las importantes organizaciones, que a través de sus productos y servicios pensados para la electricidad, permite que la gran actividad industrial de Venezuela mantenga su curso.
Costel, con casi 60 años de operaciones asentadas en el país, es una institución dedicada al área de motores, generadores y transformadores eléctricos, equipos ampliamente utilizados en la industria petrolera, química, agrícola, papelera, farmacéutica y hasta para la elaboración de alimentos y bebidas.
En general, este grupo empresarial se dedica a proveer importantes servicios en materia de electricidad para cubrir necesidades de los sectores económicos primordiales de Venezuela, los cuales son garantes de la subsistencia del país. De allí la relevancia del Grupo, que sigue resguardando dichas actividades.
Tal como lo afirmaron representantes de Costel, cuya sede principal está en el estado Carabobo, la intención que tienen es clara: “brindar siempre un servicio adecuado, bien integrado con aliados operativos, clientes, proveedores y todos los entes reguladores”.
Soluciones eléctricas
En sus tres modelos de negocio, conocidos como Costel Ingeniería Eléctrica, Sidelca y Mantenimiento Eléctrico Costel, el Grupo ha permitido alcanzar 70.000 trabajos correctamente realizados y han conseguido responder a una gran diversidad de planteamientos eléctricos, lo que los ha posicionado y hecho ganar la confianza de las grandes industrias.
“Nos especializamos en atender necesidades asociadas con la generación y transformación de energía, lo que nos ha llevado a trabajar en prácticamente todos los sectores económicos de nuestra Venezuela”, han dicho los voceros de la organización. «Costel siempre busca impulsar la energía del país», agregan.
Los trabajos exitosos de Costel, que le han permitido “impulsar la energía del país”, según lo expresaron, están distribuidos en sus tres modelos de negocio especializados para cada clientela.
Por ejemplo, en Costel Ingeniería Eléctrica, no menos de 30.000 trabajos fueron realizados de manera exitosa. Algo notorio para los venezolanos, al considerar que esta división se dedica a la construcción de los tan requeridos transformadores eléctricos trifásicos y monofásicos, así como autotransformadores, además de otros fabricados de acuerdo con los gustos del cliente.
En Sidelca, por su parte, son al menos 25.000 trabajos, dedicados al mantenimiento, reparación y rebobinado de los motores y generadores eléctricos fabricados por la compañía. Detallan que cuentan con equipos de diagnóstico “para detectar cualquier mal funcionamiento de los motores, evitando tener que detener el proceso productivo en cualquier organización”.
Y en Mantenimiento Eléctrico Costel, que ha cumplido con éxito más de 15 mil trabajos, hay un laboratorio de ensayo, donde realizan estudios con los dispositivos tratados, sometidos a tratamientos sustentados por normas nacionales e internacionales.
Esta área de análisis está avalada por el Servicio Autónomo Nacional de Normalización, Calidad, Metrología y Reglamentos Técnicos (Sencamer), que por cierto avanza actualmente en el proceso de evaluación para la renovación de la acreditación que le ha otorgado a esta unidad.
En resumen, el Grupo Costel, con su trayectoria que inició en 1964 dentro del mercado eléctrico venezolano, ha ganado un honorable puesto en el tejido industrial y empresarial del país que con grandes esfuerzos ha logrado sacar a flote la economía venezolana, sobre todo en los últimos tiempos.