Es inaceptable subir tarifas de servicios públicos cuando son deficientes: Richard Casanova (CIV)
El directivo nacional del Colegio de Ingenieros de Venezuela, Richard Casanova, afirmó este viernes que el aumento de tarifas de varios servicios públicos es desproporcionado «y en muchos casos inmoral».
«Podemos entender que las tarifas están subestimadas y requieren ajuste pero este es el peor momento para tomar estas medidas. Es necesario postergar -al menos por 60 días- cualquier incremento», puntualizó.
A juicio del dirigente gremial, justo cuando el país está paralizado, amenazado por una pandemia y sometido a confinamiento, se incrementa para los usuarios el costo de los servicios públicos, lo cual puede agudizar la severa crisis que castiga a vastos sectores de la población. «Solicitamos que se suspendan los aumentos hasta que se reanuden las actividades económicas del país. Estamos en una emergencia sanitaria, además vivimos una severa crisis social y económica. En estas circunstancias, dicho incremento resulta insólito, contraproducente y hasta peligroso», expresó.
En algunos casos, el aumento es excesivamente elevado, hasta un 20.000% y «no dudamos en calificarlo como inmoral pues se trata de servicios que funcionan de manera muy precaria, tanto por las limitaciones de acceso al mismo como por la frecuencia y baja calidad».
Insistió el vocero de la Fundación Construyen País en que la situación es grave y hace que el desproporcionado aumento sea inaceptable. Por ejemplo, se refirió al caso del agua potable que -según las encuestas- «un 75,9% de la población recibe un servicio irregular y/o de mala calidad». Lo mismo pudiera decirse del servicio eléctrico, «donde apenas 3,6% de los usuarios recibe un servicio regular y sin fallas. En este momento de dificultades ¿A quién se le ocurre cobrar más por un servicio que se presta con tanta deficiencia?», se pregunta.
El agua es clave para el cumplimiento de las medidas sanitarias preventivas ante la pandemia y la electricidad es esencial para garantizar el mínimo funcionamiento del país, «en medio de esta coyuntura difícil, pechar a la familia venezolana y privarla de estos servicios puede conducir a un mayor deterioro de la calidad de vida de la población y a elevar los niveles de riesgo», aseguró Casanova.
Otros servicios
Según el vicepresidente de la Asamblea Nacional de Representantes del CIV, la situación es similar cuando nos referimos a otros servicios cuyos estándares de calidad son muy precarios. «Tal es el caso del gas doméstico, que se ha convertido en un drama permanente de los sectores populares. O los desastrosos servicios de telefonía e internet, los cuales han colocado a la Cantv como la peor referencia en el área de telecomunicaciones».
Finalmente, a propósito de los servicios públicos que prestan empresas del sector privado, Richard Casanova hizo un llamado a la sensatez y la solidaridad, «es necesario entender el momento que atraviesa el país y adecuar sus políticas de ajuste a la realidad que vive la familia venezolana».
Nota de prensa