Personal sanitario de Cuba recibirá interferón en dosis preventivas

El Mundo | mayo 4, 2020 | 2:22 pm | .

La Habana, 4 may (EFE).- El personal sanitario de Cuba recibirá dosis preventivas del antiviral interferón para elevar su protección ante el COVID-19, anunció este lunes el director de Epidemiología del Ministerio cubano de Salud Pública, Francisco Durán.

El medicamento será suministrado en forma de gotas nasales a los profesionales de la salud, una vía de aplicación con un efecto similar a su inhalación mediante un nebulizador, explicó Durán durante su conferencia de prensa televisada diaria.

Esta fórmula, que también puede administrarse en inyecciones, ya estaba siendo utilizada en población de riesgo como los usuarios de centros de asistencia social.

También se emplea en el protocolo de tratamiento de «prácticamente todos» los pacientes que han contraído la enfermedad, dijo el epidemiólogo.

El personal sanitario cubano destinado en los hospitales y centros que tratan los casos de COVID-19 en Cuba trabaja en turnos rotatorios de dos semanas. Cuando finalizan ese periodo, deben guardar otros quince días de aislamiento en centros habilitados para ese fin.

¿Qué es el interferón?

Días atrás Durán señaló que el interferón se aplica desde el primer momento, tres veces a la semana por vía intramuscular, tanto a pacientes confirmados como a sospechosos con el objetivo de prevenir complicaciones en la evolución de la enfermedad.

Cuba suma hasta este lunes 1.668 casos confirmados y 69 muertes por el coronavirus SARS-CoV-2.

El Interferón Alfa 2B, producido por la estatal BioCubaFarma y que se emplea en el tratamiento de infecciones virales provocadas por el VIH, el virus del papiloma humano y las hepatitis tipos B y C, fue uno de los medicamentos con los que se trató la COVID-19 en China en combinación con otros fármacos.

Se trata de un compuesto natural que interfiere en la multiplicación viral creando un mecanismo de inhibición en el primer nivel de respuesta del organismo, según han explicado científicos del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB) de la isla, donde fue creado en la segunda mitad de los años ochenta.

Apuesta por el refuerzo inmune

Desde que a mediados de marzo se reportaron los primeros casos de coronavirus en el país, las autoridades sanitarias cubanas han apostado por la prevención de los contagios desde el nivel primario de salud, con especial atención a los sectores más vulnerables.

El objetivo es el de elevar la inmunidad de las personas con diferentes tratamientos.

A principios de abril comenzó a repartirse gratuitamente a la población de riesgo una fórmula homeopática denominada PrevengHo-vir para «incrementar las resistencias y defensas del organismo» frente a enfermedades virales y respiratorias agudas, dijo entonces el jefe del departamento de Medicina Natural y Tradicional del Minsap, Yohan Perdomo.

Posteriormente el producto fue suministrado casa por casa al resto de la población a través del sistema de atención primaria.

Sin embargo, los expertos cubanos advirtieron de que el producto «no evita el contagio ni excluye las medidas de prevención» como el lavado frecuente de manos, la distancia social y el uso de mascarillas.

Otra de las alternativas que se investigan es una vacuna para fortalecer la «inmunidad innata» frente a agentes infecciosos que ya se está probando en pacientes positivos a la COVID-19, voluntarios sospechosos y sus contactos, pero que no constituye una cura, según avanzaron hace una semana responsables del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología en la televisión estatal.

El nombre provisional de la vacuna es «inmunopotenciador CIGB 2020» y sus resultados son «alentadores» de acuerdo al director de Investigaciones Biomédicas del citado centro, Gerardo Guillén.