Batalla naval

Opinión | abril 16, 2020 | 6:18 am.

¡ Presidente, presidente !, entró gritando a su dormitorio el jefe del G-2 cubano para informarle que tenía una llamada de emergencia de parte del comandante del guardacostas o BVL (Buque de Vigilancia Litoral) que patrulla en el mar Caribe.

-Espero que sea importante para haberme despertado a medianoche. ¿Aló, aló?, pero nadie respondía.

-¿Qué carajo pasa que no atienden?

Presidente. La llamada es por el teléfono rojo conectado al Alto Mando Militar. No por su celular.

-Discúlpame esa. Es que me levante medio turulato. Aló, ¿con quién hablo?.

Le habla Sardina en Lata, el comandante de la nave.

-¿Queé jodedera es esta? ¿Y ese nombre?

Presidente, son los seudónimos que, por razones de seguridad, le han asignado a nuestros servicios de inteligencia. El suyo es Bagre 1, para que no se sorprenda cuando se lo digan.

-Soy todo oídos Sardina en Lata. ¿Cuál es la urgencia?

Una nave no identificada se acerca a los límites de nuestro mar territorial.

-Mucho cuidado con eso. Puede ser una incursión imperialista ordenada por el gringo Donald Trump. ¿Que señalan el radar de vigilancia y el sistema de inteligencia electrónica de la fragata?

No indican nada. Recuerde que desde que nos la envió el camarada amigo Zapatero desde España, los sistemas no han funcionado y no hemos podido repararlos por falta de piezas.

-Bueno, Sardina en Lata, proceda a dispárales primero que después averiguamos.

Tampoco podemos hacerlo, Bagre 1, los cañones no tienen municiones… Zapatero se hizo el loco y no las envió porque no le habían asignado su mina de oro.

-Entonces, procedan a interceptar a esa nave. Atraviésense en su camino, a ver qué hacen y cuando se paren abórdenlos y tomen el control de esa embarcación. Sardina en Lata, dé por segura la Orden Libertador con cordón y espada por ese glorioso y revolucionario triunfo frente a la agresión imperialista.

Bagre 1, gracias por ese reconocimiento. Pero, permítame informarle que nuestro guardacostas tiene solo 80 metros de eslora y la de la nave intrusa es de ¡ 122 metros ! En términos de desplazamiento, la nave enemiga pesa 8.300 toneladas y nosotros de vaina llegamos a ¡ 1.500 toneladas !…. Si hacemos lo que usted nos ordena nos van a hundir.

-Patria o muerte, fue la lacónica respuesta de Bagre 1. Y el resultado no se hizo esperar: El barco enemigo siguió su curso y la nave revolucionaria quedó partida en dos toletes.

En horas de la mañana, Bagre 1 se dirige a la nación para informar que el país fue vilmente atacado de manera sorpresiva por un acorazado enemigo que con su destructivo poder de fuego: misiles, artillería pesada, helicópteros, lanchas rápidas, cañones de 305 mm, y no dudamos, resguardado por un submarino nuclear, logró hundir a nuestro glorioso patrullero, a pesar de la tenaz resistencia de nuestros patriotas marineros de la armada. Bajo ninguna circunstancia vamos a permitir que la planta insolente de los gringos imperialistas profane el sagrado mar de nuestra patria …. Rodilla en lancha… Venceremos.