Los años de la peste

Opinión | marzo 24, 2020 | 6:30 am.

Sobre este flagelo cabe recordar lo narrado por Daniel Defoe, el mismo autor de Robinson Crusoe, en su Diario de la peste. También la conocida novela de Albert Camus titulada La peste. El primero describe los hechos ocurridos en Londres alrededor de 1660. Camus probablemente se refiera a lo sucedido en Orán, Argelia, alrededor de 1849. Aunque fueron terribles en pérdidas de vidas y en daño a la economía, no perduraron más de dos años. Igualmente, la terrible y mal llamada gripe española de 1918.


En Venezuela este no es, ni será recordado como el año de la peste. Son muchos más. Este flagelo que de tiempo en tiempo ha afectado al mundo ha sacado a relucir lo bueno y lo malo del ser humano,

La peste roja que nos golpea tiene ya 21 años diezmando y empobreciendo a nuestra población. El coronavirus Covid-19 desaparecerá en poco tiempo gracias a la abnegada labor de nuestros médicos, enfermeras y personal de apoyo, siempre y cuando prive la sensatez de los ciudadanos de acatar las recomendaciones pertinentes. ¿Que debemos hacer para eliminar la peste roja y para que no regrese en unos años?

El virus de la peste roja infectó inicialmente a un gran número de compatriotas quienes gradualmente fueron inmunizados al percatarse de que el objetivo no era construir algo nuevo en donde prevaleciera la justicia social, sino destruir todo por resentimiento y por incapacidad. Inicialmente muchos pensaron que era un virus no letal que producía un simple resfriado.

El estandarte de la lucha lo esgrimió la Confederación de Trabajadores de Venezuela, Fedecámaras, Asamblea de Educación, periodistas, trabajadores petroleros, algunos dirigentes políticos y una multitud de ciudadanos no militantes de partidos políticos. Estos estaban en esos momentos en terapia intensiva y por ello prefirieron no participar en las elecciones parlamentarias del 2005, pero gradualmente se recuperaron y han sido baluartes en la lucha por la democracia, con diputados y dirigentes asesinados, torturados, encarcelados y exiliados.

Hoy el virus rojo está acorralado. Todavía no se ha logrado una vacuna para erradicarlo, pero está acosado por las protestas de los ciudadanos y la labor de nuestros políticos en el exterior, que ha permitido el desconocimiento del usurpador Maduro, el reconocimiento de Guaidó como presidente encargado y la aplicación de sanciones. La reciente reelección de Almagro como Secretario General de la OEA se debe a su tesonera labor en defensa de la democracia y al apoyo del Grupo de Lima y Estados Unidos, así como al trabajo realizado por nuestro embajador Gustavo Tarre Briceño, por Carlos Vecchio y Julio Borges.

Con la lamentable aparición del Covid- 19, nuestro sistema de salud, tal y como han denunciado lo profesionales de esa área, no está en capacidad de enfrentar esta pandemia. Se requiere el ingreso de ayuda humanitaria que el régimen se ha negado a aceptar. Además, el impedimento para trabajar de personas que dependen de un ingreso diario, provocará convulsiones en todo el país que podrían desencadenar la salida del régimen. ¿Qué hacer si esto sucede? ¿Y si no sucede?

En cualesquiera de los casos será inevitable ir a elecciones presidenciales y parlamentarias. Como deben realizarse en un tiempo perentorio sería un suicidio político ir a las mismas con varios candidatos y tampoco es conveniente perder tiempo en enfrentamientos internos en elecciones primarias,las cuales serían deseables en un escenario normal.

Por ello se impone que de una vez presentemos a nuestro candidato. ¿Alguien duda de quién tiene actualmente mayor aceptación y menor rechazo? Desde luego tiene que ser un gobierno surgido mediante un pacto, político, en el cual tengan cabida las diferentes toldas. Una vez en el poder, este gobierno de transición deberá también incluir personas simpatizantes del chavismo, no incursos en delitos. La peste roja puede ser controlada y erradicada, o al menos atenuada para que cuando regrese, porque el populismo siempre regresa, lo haga como un inofensivo resfriado.

Como (había) en botica: La crisis obliga al próximo gobierno a dar un impulso gigantesco a la agricultura. Por lo pronto, nuestros productores agropecuarios requieren combustibles para poder producir el alimento. Ante la mirada de las fuerzas de seguridad, los paramilitares rojos imponen el toque de queda a tiros y tienen prioridad sobre los médicos para surtirse de gasolina. Que en Italia, en donde hay agua, electricidad, comida, medicinas y combustible, vuelen aviones militares puede justificarse. Que lo hagan sobre Caracas en Operación Alegría es una burla de Maduro, Padrino, Ceballos y Juliac .El periodista chavista Luis Hugas no es solo una vergüenza para el gremio sino para la humanidad. Libertad para el periodista Darvinson Rojas, detenido por informar sobre casos de coronavirus¡No más prisioneros políticos, ni exiliados!

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