Carta de un socialista del siglo XXI al Niño Jesús
Estimado camarada:
Ante todo, un saludo revolucionario y antiimperialista desde esta bolivariana patria, verdadero reino de los cielos en la Tierra por obra y gracia de nuestro Comandante eterno como UD y su papá. Visto que ya nuestro generoso Líder decretó las navidades anticipadamente, a fin de que seamos más felices de lo que somos, paso a exponerle la lista de aguinaldos que quisiera recibir:
• Las obras completas del comandante, soy egresado de la Misión Ribas y operado de cataratas en la Isla de la felicidad, pero no tengo nada que leer y quiero practicar.
• El CD con las canciones cantadas y los poemas declamados por nuestro sensible comandante, a fin de escucharlas cuando haya luz, no están los tiempos para gastar en baterías y seguir contaminado como lo hacen los capitalistas.
• Una pistola de 9 mm, no tengo fuerzas para cargar con un fusil de esos que les dan a los milicianos. Recuerde que la revolución es pacífica, pero está armada.
• Una moto para mi nieto mayor; conmigo de parrillero seremos la pareja más envidiada por los colegas del colectivo del 23, tengo excelente puntería y estamos dispuestos a quebrar a quien se nos ordene.
• Una docena de franelas rojas con los ojitos del Padre de la Revolución.
• Unas 10 cajas CLAP para repartir entre la familia.
• Tres perniles de cochino con el mismo fin.
• Cinco cajas de cerveza, aunque sean de las que fabrica el burguesito apátrida.
Muchas gracias. Saludos para UD, su papá y su mamá, y para la paloma blanca que no sé si es su mascota. Me despido con una frase de El Comandante Eterno, quien siguió sus pasos redentores.
Por Cristo, el más grande socialista de la historia, por todos los dolores, por todos los amores, por todas las esperanzas, que haré cumplir con los mandatos supremos de esta maravillosa Constitución, aún a costa de mi propia vida.