
Él cree que en medio del clima actual que se vive en el país, donde se está discutiendo la Ley de Amnistía y Reconciliación para liberar a los presos políticos, la única solución es que los venezolanos comiencen a perdonarse entre ellos sin esperar un salvador.
"Creo que una de las cosas que nos está jugando en contra es creer que pueda existir un atajo que provoque la unificación del país. Eso es una cosa muy latinoamericana también, se espera que llegue una persona a aglutinar, a salvarnos", destacó.
"Yo creo que para Venezuela no va a ser tan romántico como tener un gran héroe nacional, un deportista que de alguna forma sirva como fuente de inspiración para esa reconciliación".
"A nosotros nos toca el trabajo más duro y más individual, que es comenzar a perdonarnos entre nosotros mismos de manera directa. Porque al final una visión del país no se va a imponer sobre la otra. O nos ponemos de acuerdo o nos hundimos todos al mismo tiempo".