Milagros Mata Gil, a LGA: Fui detenida por una venganza personal de Tarek W. Saab

Nacionales Política | mayo 3, 2021 | 5:34 pm | .

Al mediodía del 31 de marzo, la escritora Milagros Mata Gil regresó a su casa en El Tigre, Anzoátegui, cuna «del fiscal Saab». La autora ese día terminaría en un calabozo, detención que a su juicio responde a una «venganza personal» del fiscal general.

«Cuando llegué los vecinos, alarmados, me informaron de que había llegado una comisión del Conas, cinco hombres profusamente armados, buscándome. Como no sabían mi dirección exacta, habían preguntado a la jefa de calle. Traté de indagar por qué me buscaban, en ese momento no tenía idea de por qué lo hacían. En previsión de que volverían, me bañé y publiqué en las redes lo que estaba pasando. A los pocos minutos, recibí la llamada de Jorge Márquez, quien me dijo que debía presentarme sin esperar a que me buscaran y que él me acompañaría como abogado. Otros amigos lo desaconsejaron, pero no soy persona de andar escondiéndose», relató a La Gran Aldea.

Era buscada por escribir una crónica sobre una doble boda en Puerto La Cruz, a la que asistió Saab.

Dos escritores de 70 años ante un comando vestido de negro

«Llegamos a la sede del CONAS, donde ya estaba mi amigo el poeta Juan Manuel Muñoz, conocido como ‘Moriche’, a quien habían ido a sacar de su casa. Imagina el asunto: dos personas de 70 años frente a una amenaza de hombres vestidos de negro (de paso, sin tapabocas). El teniente que nos recibió se sorprendió de que me presentara y hasta se avergonzó. Algunos opinan que le habían dado orden de no maltratarnos. A cada rato insistía en que no estaban violando nuestro derecho y en que nos estaban tratando bien. Nos habló de la Ley contra el odio y bla, bla, bla. Desde un principio le hice saber que tenían que ponerse el tapabocas. Llegó el fiscal Jairo Gil y habló con Márquez, nuestro abogado. Después, creo que por su petición, nos llevaron a una especie de calabozo, con un hombre armado con pistola y escopeta doble sentado en la puerta. Ahora, rememorándolo, siento una gran angustia».

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