España concede asilo al hermano de Óscar Pérez para evitar su regreso a Venezuela: El Mundo

El Mundo | febrero 9, 2021 | 6:09 pm | .

El Ministerio de Interior de España concedió el derecho de asilo a Luis Armando Pérez, hermano del policía rebelde que hizo frente durante seis meses a Nicolás Maduro. De esta forma, el Gobierno español rectifica la denegación previa de su estatus como refugiado y evita su regreso a Venezuela, “que sería mi muerte”, como explicó a finales del año pasado, reseñó El Mundo.

“Me llamaron del Ministerio, de la Subsecretaría de Interior, para pedirme disculpas varias veces y comunicarme que me enviarían de inmediato la resolución. Acaba de llegar”, confirmó este martes el hermano de Óscar Pérez en exclusiva a El Mundo. Este famoso piloto de helicópteros, convertido hoy en un símbolo de la resistencia contra el “régimen” bolivariano, fue ejecutado de forma extrasumarial a principios de 2018, tras la toma de la vivienda donde se escondía a las afueras de la capital.

Tanto Pérez como sus seis compañeros, incluida una enfermera, no dispararon un solo tiro y se rindieron a los agentes revolucionarios, casi mil efectivos entre militares, policías de las FAES (Fuerzas Especiales de la Policía, definidas por Naciones Unidas como los “batallones de exterminio” del chavismo) y colectivos paramilitares. Su rendición no les salvó la vida: fueron asediados, ametrallados, bombardeados y ejecutados. Todos ellos presentaban tiros de gracia en la cara y en la nuca, según demostraron las autopsias y las imágenes publicadas antes por El Mundo.

La resolución en poder del hermano mayor de los Pérez también incluye el derecho de asilo para sus hijos y su mujer por extensión familiar. “Me complace saber que existe en este hermoso país la independencia de poderes, cuestión que nosotros perdimos hace muchos años”, subrayó Luis Armando, quien agradeció a la Subsecretaría de Interior la resolución positiva de su recurso administrativo. El refugiado venezolano contó con la colaboración jurídica de la Cruz Roja.

Haga click aquí para leer la nota completa en El Mundo